El desarrollo de Internet, y en particular de la Web, sigue su curso. Mientras millones de personas recién asoman sus cabezas a comunidades propias de la Web 2.0, lo cierto es que el futuro ya se está construyendo. Lo que viene es la Web 3.0
Primero, conozcamos a su predecesora. La Web 2.0 es sólo un concepto. No hay que actualizar el equipo ni nada parecido. Se trata de un conjunto de premisas sobre el tipo de contenidos y aplicaciones presentes en la Red, como que todo gira entorno a comunidades de usuarios, la gestión y divulgación de la información que no sigue una estructura jerárquica rígida (favorecer las etiquetas de términos clave en detrimento de los directorios), o el favorecimiento del intercambio de información entre usuarios.
Se ha llegado a decir que esta filosofía era la más democrática, dado que en muchas aplicaciones, eran los usuarios los que proponían información y eran los usuarios los que decidían lo que era interesante y lo que no. También se ha dicho que era la que más favorecía el desarrollo de nuevas tecnologías, dado que apoyaba a las pequeñas empresas más flexibles y consideraba que las aplicaciones estaban en constante fase "beta" (en desarrollo). También ha favorecido la combinación de tecnologías diferentes a la hora de crear nuevas aplicaciones para la Web, los llamados "mashups".
Entonces, ¿qué es lo que impulsa la creación de un nuevo estándar de aplicaciones y contenidos a través de la Red, y qué novedades son las que nos puede ofrecer?
Web 3.0
Para entender la necesidad de una Web 3.0 hay que ver cómo se accede a la información a través de los buscadores. Si un usuario desea encontrar un restaurante en su ciudad, seguramente hará una búsqueda parecida a "restaurante en ciudad real" o "comer en valencia". El buscador intentará cotejar las palabras clave (restaurante, ciudad, real) con su base de datos, pero no sabrá realmente qué es lo que buscamos.
Aquí es donde entra el concepto de "Web semántica", conocida también como Web 3.0. Se trata de añadir, tal como se hace en las etiquetas "META" de las páginas Webs, elementos identificativos del contenido de la Web. De la misma manera que para visitar una página Web no tenemos que escribir la IP del servidor, sino una dirección mucho más fácil de recordar (www.gigabytes.cl), el objetivo es que cuando le pidamos información a una aplicación basada en Web no tengamos que entender su manera de pensar, sino ella entender la nuestra.
De hecho la idea no es nueva, y es el propio Tim Berners-Lee, padre de la WWW, quien ya quiso implementar algo parecido en la primera versión, pero las limitaciones tecnológicas se lo impidieron. Actualmente, los "microformatos" son la respuesta más realista de implementación a corto plazo.
Si bien, en general, se asocia el término al de Web Semántica, acuñado por Tim Berners-Lee, cabe acotar, valga la paradoja, que no existe total consenso acerca de lo que significa la Web 3.0. Aunque se coincide en que esta etapa añadirá significado a la Web, no hay acuerdo sobre cuales son los caminos más apropiados para su desarrollo.
Se trata de una serie de estándares pensados para aplicaciones concretas: definir los campos relacionados con un usuario, con una opinión, etc. La idea de la Web semántica es no tener que centrarse en casos concretos para definir "cápsulas" de información, sino obtener una estructura de conocimiento mucho más amplia y flexible.
¿Es la Web Semántica sinónimo de Web 3.0?
De lo dicho anteriormente se desprende que no, aunque muchas veces estos términos sean empleados como tales. Quizás la principal diferencia sea que la Web 3.0 se concibe como un estadío a ser alcanzado en mayor o menor plazo, mientras que la Web Semántica es un proceso evolutivo en construcción permanente.
En tal sentido, como señala Berners-Lee, ya estamos inmersos en ella. Es de suponer que, tal como es concebida, trascenderá tanto el concepto de Web 3.0, como el de sus sucesoras.
Problemas
Como cualquier idea que mezcla una dosis igual de conceptos revolucionarios y de falta de concreción en la propuesta, los problemas potenciales que surgen de su simple enunciado son numerosos: para comenzar, significa redefinir el funcionamiento de los buscadores, lo cual podría hacer que el conocimiento y los procedimientos adquiridos por las principales empresas pierdan su valor.
Además, si ya existen trucos para engañar a los buscadores y conseguir mejores sitios en los resultados de las búsquedas, un sistema tan complejo como el de la Web semántica puede hacer crecer este problema exponencialmente mediante el uso del "spam semántico". Por último, como hemos avanzado antes, existen otras corrientes que buscan soluciones a corto plazo (microformatos), lo cual hace suponer que a medida que se desarrollen los estándares de esta nueva Web, surgirán visiones divergentes de la misma, y llegar a un acuerdo sobre un único formato puede ser harto complicado.
Otras implementaciones
Básicamente, tienen que ver con los avances y proyectos en curso que tienden a una cada vez mayor y más eficiente incorporación de la Web a la cotidianidad. Se habla así, de conceptos tales como: Web 3D, Web centrada en multimedia y Web permanente.
Junto con los microformatos, la definición de estándares es sumamente importante: identificadores uniformes de recurso (URIs), base de la Web semántica, el Extensible Markup Language (XML) fundamento sintáctico de la misma y el marco de la descripción del recurso (RDF).
En febrero de 2004, el World Wide Web Consortium (W3C) publicó las recomendaciones para el RDF y el Ontology Web Language (OWL), Este último describe la función y relación de cada uno de los componentes de la Web Semántica.
¿Qué es la Web 3D?
Se llama así, a lo que muchos ven como una extensión de los mundos virtuales, similar a la famosa Second Life o There.com se cree que en el futuro la Web será una gran alternativa al mundo real, donde se podrá recorrer el planeta a través de ella, sin abandonar el escritorio.
La experiencia sería semejante al actual Google Earth. Compañías como Google y Microsoft trabajan en este tipo de proyectos.
La Web centrada en multimedia
Se refiere a una Web que ofrezca, no solamente búsquedas basadas en metadatos, sino por similitudes en la multimedia. La Web "mediocéntrica" es una Web enfocada en los multimedios, donde se podrán hacer búsquedas por similitud, de imágenes, música y videos, con sólo mostrar al buscador el medio de referencia. Entre las Compañías que están trabajando en estos proyectos se encuentran Ojos y Polar Rose.
¿Qué es la Web permanente?
También llamada Web omnipresente o pervasive Web es una Web que está en todas partes, no sólo en el PC o celular sino en la ropa, joyas, automóviles, etc.
Es un concepto, que se ha extendido a partir del pasaje de los PC a los teléfonos celulares y PDA. Según un artículo publicado en el wiki Wadooa, el laboratorio de multimedios del MIT , ya está trabajando en estas ideas a partir de la creación de espejos de baños y ventanas de casas conectados a internet.
No todas las maneras de conseguir la Web semántica pasan por redefinir los estándares del lenguaje con el que se maquetan las páginas Web. También existen los agentes inteligentes, aplicaciones que intentan entender la manera de hablar de los seres humanos a partir de complejos algoritmos que no sólo tienen predefinidos sistemas de detección de palabras o de construcciones gramaticales, sino que también pueden aprender a partir de la interacción con los usuarios. Aunque este tipo de aplicaciones ya llevan tiempo entre nosotros, se espera que la potenciación de la filosofía Web 3.0 las haga todavía más potentes, diversificando sus tareas (agentes de búsqueda de información, organización de la información, interacción con el usuario), y consiguiendo resultados mucho más relevantes para consultas formuladas con lenguaje "no pre-formateado". Resumen
En definitiva, podemos resumir de manera sencilla la evolución de los diferentes formatos de la Web: la 1.0 nos trajo las aplicaciones realizadas por unos pocos para muchos. La 2.0 explotó la interacción entre los usuarios: los usuarios buscaban la información, la elaboraban, y se potenciaba la comunicación entre ellos para tener una mayor riqueza de contenidos. La Web 3.0 dice que han de ser "las máquinas" las que nos ofrezcan el mejor contenido posible a partir de una petición concreta realizada en lenguaje normal (no formateado para ser entendido mejor por un programa), obteniendo los datos de donde lo encuentren, sea de redes sociales, o de otras aplicaciones con las que se comuniquen para ampliar su base de conocimientos.
Fuentes:
Terra.es
maestrosdelweb.com
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